Las
personas somos seres que vivimos mediante nuestros sentidos y de percibir las
cosas que nos rodean. Lo hacemos a través de lo que tocamos, lo que oímos, lo
que saboreamos, lo que olemos y sobre todo lo que vemos. El sentido de la vista
está catalogado como el sentido más importante, ya que “las imágenes son el
mecanismo más eficiente y completo para transmitir información sobre un
estímulo determinado”. Las
imágenes que recolectan nuestros ojos interpretan el mundo exterior y nos
interrelacionan con él de una forma más acertada.
Nuestros
ojos son la puerta de entrada por donde ingresan los estímulos de luz y en el cerebro
se realizan los procesos de percepción visual, por los cuales somos capaces de
interpretar las formas de los objetos, diferenciar sus colores, sus movimientos
y las distancias y ubicación de donde se encuentran.
Nuestros
ojos perciben dichas imágenes, y a los objetos que la componen, en tres
distintas dimensiones: alto, ancho y profundo (de donde proviene el nombre 3D).
Cada ojo nos proporciona una información distinta, la que cada ojo observa, y a
la habilidad de unir estas dos imágenes se la llama visión estéreo que viene
del nombre completo visión estereoscópica y más conocido como visión binocular
(dos ojos).
Si
se está leyendo este documento desde una versión digital se podrá observar que
la imagen almacenada en el siguiente enlace:
Una
definición con enfoque matemático sobre visión estéreo dice: “La diferencia
horizontal entre cada perspectiva se llama paralaje y se debe a la distancia
que existe entre el ojo izquierdo y el derecho, llamada distancia interocular”, ambas
perspectivas combinadas en el cerebro forman una imagen tridimensional, a este fenómeno
se lo conoce como esteorepsis.
Gracias
a este fenómeno podemos saber que objetos están cerca y cuales están más lejos.
Los animales necesitan esta información de distancia y poseen la capacidad de
ver en estéreo, sobre todo los mamíferos depredadores la necesitan para
calcular distancias para poder correr, volar o saltar y coger a sus presas para
sobrevivir. Por el contrario, los animales que son presas, mamíferos herbívoros
en su mayoría, no cuentan con esta capacidad ya que su alimento y necesidades
para sobrevivir se encuentran en dos dimensiones, el suelo.
Entre
otras aplicaciones que se han desarrollado de la visión estéreo, está la muy de
moda proyección de películas en 3D, que en realidad el origen de ésta
tecnología ya estuvo en desarrollo desde 1838 por el físico británico Charles
Wheatstone. Se basa en fotografiar dos veces una misma escena desde dos ángulos
distintos (normalmente ángulos equivalentes a la distancia de separación de
nuestros ojos) y luego usar las gafas 3D que sirven para unir las dos imágenes
desincronizadas, sirviendo las gafas así como una especie de filtro.